La dermis de nuestro cuerpo también precisa de un extra de hidratación tras habernos pasado el verano tomando el sol. Natural Honey nos aconseja sus fórmulas basadas en las propiedades de dos de los aceites más preciados del mundo, el de argán y el de oliva. El primero, cuenta con una elevada concentración de ácidos esenciales Omega 3, 6 y 9 que le otorgan un poder nutritivo y revitalizante único, así como propiedades regeneradoras y reparadoras.
El aceite de oliva nos garantiza una gran hidratación, además de un elevado poder antioxidante y anti-envejecimiento gracias a la vitamina E y protección contra los radicales libres. Ambos deberán aplicarse tras la ducha, con la piel aún mojada, antes de secarse.
La incidencia del sol en nuestra tez y escote pueden dar como resultado la pérdida de elasticidad de la piel, deshidratación o aceleración del envejecimiento, por lo que deberemos aplicar algún tratamiento que nos ayude a combatirlo. Un ejemplo es la línea de cosmética y cuidado personal Julia, que nos ofrece tres tratamientos exclusivos con los que recuperar, mejorar y rejuvenecer la dermis.